Alimentos peligrosos para los niños

Alimentos peligrosos para los niños

Escrito por: Sacra    20 abril 2010     2 minutos

Una de las peores situaciones que podemos vivir cuando nuestros hijos son pequeños es el atragantamiento. Los niños, siempre llevados por su insaciable curiosidad, buscan y encuentran todo tipo de peligros a su alrededor, incluso en el mínimo rincón donde no habíamos reparado nunca puede existir una pequeña pieza, un inaccesible tornillo o un botón caído de su propia ropa que acabe alojado en su garganta provocando unos segundos de verdadera angustia para ambos. Con unos movimientos eficaces podemos liberarle del objeto extraño pero, como siempre, lo mejor es evitar el riesgo siempre que nos sea posible.

Y una de esas situaciones de riesgo se produce durante la alimentación. Hay que tener en cuenta que según el tamaño, la forma y las características de ciertos alimentos son más propicios para provocar atragantamientos, por eso es importante que los padres estemos al tanto y evitemos, al máximo, este riesgo.

Existen algunos que debemos evitar al máximo, al menos durante la primera infancia de nuestro niño como son, por ejemplo, los frutos secos. Según han declarado los expertos es importante evitar estos alimentos, al menos entero o sin triturar, hasta los seis años. De igual modo hay que tener mucho cuidado con las palomitas de maíz y los caramelos, sobre todo aquellos que no llevan palo.

Otro grupo de alimentos con los que hay que tener ojo avizor pero no renunciar a ellos es con las frutas o verduras que contengan semillas en su interior. La pera, la manzana, la uva… debemos dársela cortada o en puré, si son muy pequeños, siempre llevando especial cuidado de que no se nos cuele ninguna semilla. Las zanahorias por su dureza y los guisantes por su tamaño también son de esos alimentos que, en un momento dado, pueden resultar conflictivos, por eso lo mejor es cocerlos y triturarlos para evitar el susto.

Como nota curiosa podemos resaltar que en Estados Unidos se considera el perrito caliente como uno de los alimentos más peligrosos para la infancia, de hecho cada año diez mil niños tienen que acudir a los servicios de urgencia por atragantamiento mientras disfrutaban de él. Un grupo de científicos de pediatría han pedido que se cambie su diseño ya que este podría ser la causa del problema.

Vía | El Bebé