El trabajo es salud

Una investigación que se realizó tomando a 1300 madres, analizando su comportamiento durante una década, ha concluido que aquellas que trabajaban tenían mejor estado de salud, además de contar con menos índices de depresión y el tiempo parcial que emplean para interactuar con sus hijos es de mejor calidad y mejor para los pequeños.

Esto se supo gracias a la labor llevada a cabo en los Estados Unidos, en donde se asegura que el trabajo nos permite estar más felices mientras nuestros hijos creces. El trabajo estuvo dirigido por el Cheryl Buehler un profesor de desarrollo humano que se desempeña en la Universidad de Carolina del Norte. Para su elaboración entrevistó a las madres poco después del nacimiento de los pequeños y le realizo un seguimiento por diez años.

Dentro de las conclusiones a las que se arribaron se supo que la salud era mucho mejor en las madres que trabajaban jornada completa o tiempo parcial, además de notar un grado menor de depresión.

Aquellas que trabajaban en jornadas parciales tenían la posibilidad de equilibrar más fácilmente el trabajo con la crianza de sus hijos que las que lo hacían con jornada completa. En el primer caso tenían la posibilidad de participar activamente de la evolución escolar.

Otro punto que se analizo es la importancia de la satisfacción personal que tienen esas madres, que le transmitirles ese sentimiento a sus hijos. Cuando tienen un trabajo ellas tienen más capacidad de fomentar el aprendizaje de los hijos que aquellas madres que no realizan ninguna actividad laboral.

Si bien esto parece lógico y obvio nunca está mal recordarlo. Si nos basamos en los casos prácticos aquellas mujeres que trabajamos contamos con la satisfacción de desempeñar una tarea mediante la cual nos sentimos útiles y gratificadas, además de contar con libertad económica. Por eso creo que la fresa que decía mi abuela ‘El trabajo es salud’ es totalmente cierta.

Vía | 20 minutos
Foto | Flickr – HastiOir

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