Polémica en Reino Unido por fertilidad in vitro con dos madres

Polémica en Reino Unido por fertilidad in vitro con dos madres

Escrito por: Sergio López    19 septiembre 2012     2 minutos

El diseño genético de los bebés ya tiene su antesala. Para evitar la transmisión de enfermedades mitocondriales, el componente genético de un padre y dos madres puede conseguirlo. Pero la polémica está servida.

Si la ciencia ha demostrado algo a través de los siglos es que todo puede tener una explicación y una conclusión meramente científica. Y en el caso de la genética no se iba a quedar atrás.

El diseño genético de los bebés ya tiene su antesala. Si lo habitual es que un padre y una madre engendren un bebé, cabe la posibilidad de que el número de las mamás aumente a dos. Todo ello para evitar la transmisión de enfermedades mitocondriales. El componente genético de un padre y dos madres puede conseguirlo.

Dicho procedimiento se está debatiendo en Reino Unido, ya que el mismo está prohibido legalmente. Por ello, un debate público va a decidir si esta técnica está exenta o no de ética, a pesar de que pueden favorecer la no aparición de enfermedades mitocondriales, que se derivan de deficiencias en el motor de células (mitocondrias). Su impacto puede causar ceguera, atrofia muscular o enfermedades intestinales y cardíacas. A través de este método, la mitocondria defectuosa se puede sustituir por una sana, gracias a la aportación genética de la otra madre.

El resultado que se obtiene, finalmente, es que el feto tiene un 99 por ciento de genética de su padre y madre y un 1 por ciento de la donante. Aunque tenga conclusión muy favorable para atajar las deficiencias celulares del feto, la posibilidad de manipulación genética ha levantado gran polémica. De ahí, la consulta popular.

El próximo año se conocerá el resultado, el cual, aunque cuente con el beneplácito del Gobierno Británico, tendrá que ser sometido a más estudios para su aprobación final. Según los investigadores, probar la seguridad y eficacia de este método podría llevar entre 3 y 5 años.

Vía | abc.es