Como hacer de tu casa un sitio seguro para tu bebé

Como hacer de tu casa un sitio seguro para tu bebé

Escrito por: Belén    16 julio 2009     2 minutos

En cuanto el niño comienza a gatear y hasta que se hace bastante mayorcito, la casa se convierte en su campo de pruebas y muchos de sus rincones en un auténtico peligro. No podemos estar con la vista en el niño las 24 horas, aunque lo intentemos, por ello es conveniente intentar protegerle lo mejor posible. Hace un tiempo Sacra nos contó algunos trucos de mamá para evitar accidentes caseros, la otra alternativa es comprar los protectores.

Puedes asegurar cualquier rincón de la casa que te pueda parecer peligroso e incluso algunos en los que nunca hubieras pensado. Puedes bloquear los cajones y armarios, asegurar que las puertas no se cierren con prácticos topes para las bisagras. Existen brazos que bloquean la tapa del inodoro y protegen tanto al bebé como tu economía, ni te imaginas lo que un niño puede tirar al water. Hay cierres para la nevera, para las ventanas corredizas e incluso anclajes para que no puedan tirarse los muebles encima.

Otras piezas de seguridad muy útiles y casi imprescindibles son los protectores de enchufes, aunque en los modernos no se puede meter los dedos, el niño podría meter un objeto metálico, y por ello lo mejor es taparlos. Las esquinas de las mesas y los muebles siempre están a la altura de la cabecita del niño que acaba de aprender a correr, así que lo mejor es cubrirlas, bien con la idea que proponía Sacra o bien comprando protectores de esquinas. Si tienes escaleras en casa, bloquealas con unas puertas de presión. Son muy fáciles de colocar y evitan accidentes que pueden ser muy graves.

El estuche de la fotografía incluye: 2 bloqueos de puerta, 1 bloqueo puertas de armario, 3 bloqueos de bisagras, 4 esquineras de mesa, 8 protectores de enchufe con llave de bloqueo. Es de Beaba y puedes adquirirlo online por 32 euros Iva incluido en Mainada.

Por mucho que protejas la casa, ten en cuenta que tu pequeño siempre encontrará aquello en lo que no has pensado y no podrás quitarle la vista de encima.

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