El botiquín con niños en casa

El botiquín con niños en casa

Escrito por: Mónica M. Bernardo    24 febrero 2009     2 minutos

En España somos muy dados a guardar los medicamentos que nos sobran tras un tratamiento y los índices de automedicación por referencias son muy elevados. Sin embargo, cuando estamos al cuidado de los más pequeños es imprescindible tener un botiquín reducido, actualizado y utilizarlo con la máxima cautela.

Ya no vale aquello de que pregunto en un foro y le doy a mi hijo aquello que le ha funcionado a otro niño. Cada caso es único y requiere un tratamiento único, aunque es cierto que dependiendo de los especialistas, las terapias son excesivamente variables. Para tener un botiquín adecuado, en especial cuando hay niños pequeños en casa, aquí te dejamos una serie de consejos.

1.- Lo primero es tener presentes las normas de mantenimiento de cualquier medicina: guardarlos en lugar seco, oscuro y con una temperatura baja. La mayoría de la gente guarda el botiquín en la cocina o el cuarto de baño, pero se recomienda instalarlo en otra estancia, dado que en las mencionadas se pueden generar vapores y humedades que podrían alterar el estado de los medicamentos.

2.- Después de escoger un buen lugar, hay que cerciorarse de que se coloca lo suficientemente alto para que los niños no puedan acceder a él con facilidad. Aunque esté en alto, también debe estar bien cerrado.

3.- Es fundamental mantener cada fármaco en su envase para evitar equívocos, y mantenerlos en perfectas condiciones junto con su prospecto. No hay que olvidar que no es cuestión de tener muchos medicamentos, sino de tener pocos pero bien seleccionados para combatir ciertas situaciones improvistas pero frecuentes en los niños (vómitos, fiebre, chichones, cortes…). No olvidar que los medicamentos no causan en los niños los mismos efectos que en los adultos.

4.- En una parte visible del propio botiquín se debería tener a mano los contactos del Centro de Información Toxicológica (91 562 04 20), el de Urgencias (112) y el del centro de salud u hospital de referencia. Si se cuenta con el contacto directo de un pediatra, anotarlo también.

5.- El último y no por ello menos importante, los expertos recomiendan revisar los botiquines cada seis meses, más o menos. Estas inspecciones nos servirán para deshacernos de las medicinas que hayan sobrepasado la fecha de caducidad, las que puedan estar deterioradas o las que presenten mal aspecto. También sirven para incluir alguno nuevo que consideremos importante.

Vía | Infancia Segura