Continuando con el tema de caída del cabello infantil, sin importar la causa por la que el niño esté perdiendo el pelo, es posible tratarla y superarla, después de que el pediatra o dermatólogo pediátrico, realicen un diagnóstico; una de las causas y tal vez la más frecuente, es el resultado de una infección micótica, conocida como tiña o tinea capitis. Este hongo ataca el cuero cabelludo debilitando el folículo, y haciendo que el pelo se quiebre con facilidad.
Normalmente, durante los primeros meses de vida, los bebés pierden el pelito con el que nacen, que es comparado con una pelusita ligera y poco a poco les va creciendo pelo nuevo, con una textura más definida y resistente; este fenómeno se denomina efluvio felógeno y no representa ninguna alarma en cuanto a la salud capilar de los bebés.