Vacunas incompatibles con el embarazo

Vacunas incompatibles con el embarazo

Escrito por: Sacra    25 enero 2011     2 minutos

Ya hemos visto en un post anterior como la utilización de algunas vacunas durante el embarazo no supone ningún riesgo, ni para la madre ni para el bebé. Es más, en algunos casos son totalmente necesarias para evitar enfermedades que podrían perjudicar muy seriamente la salud del recién nacido. No debemos olvidar que hasta que inicie su propio calendario de vacunaciones, el pequeño está expuesto a algunas enfermedades cuyas consecuencias podrían ser irreversibles.

Pero del mismo modo que existen vacunas beneficiosas y totalmente inocuas durante la gestación, también existen aquellas que, lejos de suponer una ayuda podrían perjudicar muy seriamente tanto la salud e la madre como la del niño. Por eso en el caso de que se hayan inyectado accidentalmente durante el embarazo, se deben seguir controles estrictos para detectar cualquier alteración en el embrión.

Antipoliomielítica. La enfermedad de la polio se considera ya erradicada por lo tanto ya no se inocula en las mujeres embarazadas. Tendría que surgir una epidemia importante para que, de nuevo, se permitiera su vacunación ya que son muchos los riesgos que, para el bebé, conlleva esta enfermedad.

Rubéola. Las nuevas vacunas que se utilizan contra esta enfermedad, aportan al organismo el virus correspondiente para neutralizar la enfermedad, por lo tanto no es aconsejable que se vacune a la gestante, sobre todo porque no existe, hasta el momento, experiencia suficiente que hable de las consecuencias, positivas o negativas, si son inyectadas con la dosis correspondiente. En el caso de querer quedar embarazada y no haber pasado la enfermedad, si se desea vacunarse contra ella, lo mejor es esperar de 4 a 6 semanas para buscar la gestación.

Triple viral: antirubéola-antisarapionosa-antiparotidítica. Totalmente contraindicada.

Varicela. Formalmente contraindicada aunque en algunos países se utiliza para los recién nacidos en casos graves.

Fiebre tifoidea. También contraindicada, además produce diversas alteraciones en la zona aplicada.

Fiebre amarilla. Formalmente contraindicada. Sólo se permite su utilización si se viaja a zonas donde hay riesgo de sufrir esta enfermedad ya que es preferible prevenir, aun con contraindicaciones, que padecerla. Sólo puede utilizarse a partir del segundo trimestre de embarazo.

Vía | Babysitio
Foto | Blog bebés