Los trucos de mamá para el cuidado del bebé

Los trucos de mamá para el cuidado del bebé

Escrito por: Sacra    13 junio 2009     2 minutos

Nuestro bebé pasa por etapas donde necesita de unos cuidados especiales. La salida de los dientes, por ejemplo, es una época bastante molesta no sólo porque las encías le pueden causar dolor, si no que, además, su culito también se resiente ya que sus heces, debido a una salivación más consistente, le genera un ligero sarpullido en su delicada piel.

Estos son sólo unos ejemplos de los mil y un trucos caseros que una mamá responsable tiene que buscarse ante cualquier problema de su bebé. Ya sabemos que sólo se trata de medidas urgentes e inocuas y que para nuestra tranquilidad y la perfecta salud de nuestro pequeño, ante situaciones persistentes o graves, hay que llevarlo a su pediatra para que valore las medidas que debe administrarle.

Aquí os dejo unos pequeños trucos que, quizás, os puedan servir de ayuda en esos momentos de habituales molestias.

  • Culito irritado. Una crema casera para aliviar el culito irritado de tu bebé consiste en mezclar talco con aceite de oliva.
  • La costra láctea. Hay niños a los que se les resiste la costra que, al nacer, tienen en su cabecita. Una forma sencilla de quitársela es impregnar su cabeza con vaselina y luego, con un peine pequeño, peinarle repetidamente. En un par de días tendrá la cabecita limpia.
  • Piel con granitos. Lo mejor es el Aloe Vera, además de natural y beneficioso para cualquier tipo de irritación. Si tienes una planta en casa lo puedes aplicar directamente pero también existen geles y cremas que van estupendamente.
  • Tos nocturna. Partir una cebolla y dejarla abierta en su mesilla de noche. El aroma se nos olvidará cuando dejemos de oír toser a nuestro pequeño.
  • Una astilla clavada. Si tu niño se ha clavado una astilla el mejor método para sacársela es que pongas un cazo con agua a hervir y aproveches el vaho del agua para reblandecer la zona donde se encuentra la astilla, si aprietas un poco, ya sale sola.
  • Flemas. Una buena forma de aliviar el catarro y las molestas flemas es poner una cucharada de tomillo en medio litro de agua hirviendo, dejar que repose durante unos minutos y ya está lista para tomar.

Vía | Guía del Niño