Una tradición especial: el árbol de los chupetes en Estocolmo

Una tradición especial: el árbol de los chupetes en Estocolmo

Escrito por: Sacra    29 junio 2010     2 minutos

Uno de los momentos más traumáticos durante los primeros años de nuestro bebé es el abandono del chupete. Desde que lo vamos intentando, cada una a su forma, hasta que lo conseguimos definitivamente, pueden pasar muchos llantos y explicaciones que no siempre resultan del todo efectivos. Es importante no olvidar que, por mucho apego que nuestro niño sienta hacia él, llega una edad que lo tiene que dejar por su propio bien. Por un lado no debemos crearle dependencia emocional ante el objeto y, por otro, ya le va provocando secuelas físicas, sobre todo en los dientes y en el paladar.

Yo he visto técnicas de todo tipo: desde hacerle cortes y quemar la goma quedándose como un objeto deforme y pegajoso, hasta coserle hilos negros que, a primera vista, nos dan la impresión de ser gusanos u otros bichos repelentes. Cada uno tiene sus técnicas y las hay tan variadas como niños habitan el mundo. Pero si algo es realmente original y, parece que bastante disuasorio, es este original árbol adornado con chupetes que «crece» en la ciudad sueca de Estocolmo.

Este árbol se encuentra en el Zoológico Stockholm de Skansen, en la capital de Suecia. Hasta allí acuden todos los niños suecos que quieren deshacerse de su preciado compañero, de este modo no lo abandonan del todo y pueden ir a visitarlo siempre que quieran. Aunque este árbol es el original y primero que se creó en base a esta idea, al parecer funciona tan bien, que en otras partes del mundo les han copiado el modelo, vamos que al final va a resultar que los van a tener que proteger como un bien público para la sociedad.

El árbol, que ya cuenta con 30 años de vida, surgió a partir de la idea de los empleados de la limpieza del parque que, hartos de recoger los chupetes que los niños abandonaban o perdían por la zona, decidieron colgarlos en las ramas del árbol. A partir de ahí se fue creando una divertida tradición que ya cuenta con más de 12.000 ejemplares que están dispuestos en las ramas y el tronco, creando un variopinto ornamento lleno de originalidad.

Vía | Entre chiquitines