Han sido muchas las ocasiones en las que nos hemos referido al consumo de tabaco durante el embarazo como una mala práctica, altamente nociva para nuestro bebé y con consecuencias, en muchos casos, irreversibles. Desde un parto prematuro hasta la falta de líquido amniótico o la alteración de genes, son sólo una mera muestra de las dificultades físicas y psíquicas con las que nuestro hijo puede enfrentarse en el futuro. Ahora, además, se ha descubierto que fumar durante la gestación aumenta en un 5 por ciento el riesgo de que el bebé padezca estrabismo.
En las primeras semanas de vida de un recién nacido se le realiza una prueba para detectar problemas de audición. Tres de cada mil bebés nacen con hipoacusia y es lo que se busca con esta prueba. Sin embargo la vista no se les controla hasta mucho más adelante. Un equipo del Hospital de Niños Alfred I. duPont, en Wilmington, Delaware, ha demostrado con una investigación que a los pequeños con hipoacusia se les debería controlar también la vista.
Los cambios que se producen en nuestro bebé desde su nacimiento se desarrollan de forma muy rápida. Sus sentidos pasan de ser de pequeños descubrimientos a todo un universo donde el mundo se va ampliando a modo de hallar formas, sonidos y perfumes de los que, hasta entonces, no tenía conocimiento. Es, por lo tanto, la primera evolución de nuestro bebé hacia el encuentro del mundo exterior.
El bebé recién nacido no tiene una visión definida y sólo ve claro cuando estás a 20 o 30 centímetros de su cara. Poco a poco y, dependiendo de sus necesidades, irá desarrollando su vista a lo largo de toda su infancia por lo que su agudeza visual no pasa de 0 a 100 de un día para otro. Está comprobado que, hasta los seis años, los niños no alcanzan la totalidad de su visión.
Continuamente venimos hablando de la necesidad de que, durante el embarazo, debemos seguir una dieta alimentaria rica en nutrientes y vitaminas, que sea sana y equilibrada y que nos aporte energía suficiente para afrontar los cambios con mejor estado de salud y ánimo. Además sabemos que estamos alimentando a nuestro pequeño con los mejores productos de la naturaleza. Por eso, un componente muy importante para que todo esto se produzca es la vitamina A.