Acabamos de conocer el resultado de un nuevo estudio que se ha realizado en torno a los hábitos, poco saludables, de las mujeres durante el embarazo. En este caso se han centrado en el consumo del tabaco a lo largo de la gestación, estudio que ha venido a reafirmar las graves consecuencias que este vicio tiene en el desarrollo del bebé y las secuelas que quedan impresas, por siempre, en su salud.
Aunque lo más "normal" es que una pareja en edad fértil, después de haber mantenido relaciones sexuales, quede embarazada, lo cierto es que son muchos más los casos de los que se creen con problemas a la hora de concebir. Quedarse embarazada no es tan fácil, por lo tanto ya se nos desmonta la primera creencia que tenemos sobre la fertilidad.
Si tuviéramos que hacer una lista con todos los perjuicios con los que socavamos la salud de nuestro bebé mientras se fuma durante el embarazo, estaríamos ante un número tal de problemas que, seguro, dejaríamos de hacerlo al instante. Son tantos los puntos físicos y psíquicos que se ven alterados que es necesario buscar una solución, para esta adicción, mucho antes de pensar en traer un hijo al mundo.
Todos sabemos las graves consecuencias que acarrea el consumo del tabaco a lo largo del embarazo. Lo ideal es dejar de fumar en cuanto nos planteemos ser padres, pero si ya hemos llegado a ello y todavía seguimos enganchadas a la nicotina, lo primero que debemos hacer es consultarlo con nuestro médico, él seguro que sabrá manejar nuestro caso de una manera individual y personalizada. Porque a menudo, las terapias alternativas no son del todo fiables ni recomendables.
Ya hemos visto como las causas de la infertilidad masculina pueden ser muy variadas. Desde aquellas que vienen heredadas de los progenitores, hasta las que nos implican en los hábitos de vida, incluso la edad se ha convertido, en muchas ocasiones, en un impedimento para lograr el tan deseado embarazo.
Parece que, poco a poco, la sociedad se va concienciando sobre la necesidad de evitar ciertos vicios, altamente perjudiciales, al menos en espacios públicos y que puedan dañar a terceros. Dicen las estadísticas, que de padres fumadores, salen hijos fumadores, no podemos olvidar que desde que nacen están absorbiendo información que va a quedar totalmente incrustada en su cerebro y en su paisaje emotivo para siempre. Nosotros, como padres, somos la primera referencia, el ejemplo a seguir y el ideal "perfecto y correcto" de vivir y comunicarnos.
Durante el embarazo se pueden presentar ciertas complicaciones que, sin motivo previo o antecedentes, aparezcan para imprimir cierto peligro a la gestación. Se trata de problemas de salud que, bien por desconocimiento o que vengan asociados a ciertos hábitos, no demasiado sanos, provoquen serios problemas en el desarrollo del bebé. Uno de ellos es el desprendimiento de placenta.
Ya sabemos lo perjudicial que resulta para la embarazada, pero sobre todo para su bebé, el hábito del tabaco. Fumar durante el embarazo es causa de muchos problemas físicos y psíquicos que puedes presentar el niño durante su desarrollo, por eso es importantísimo dejar este vicio antes de quedarte embarazada. Pero a menudo sucede que no es la mujer encinta la que tiene este mal hábito, pero convive en un ambiente rodeado de fumadores, es entonces cuando se produce lo que se llama tabaquismo pasivo.
De todos es conocido las graves consecuencias que genera el tabaquismo durante el embarazo. Tanto si estás planeando ser madre como si acabas de enterarte de tu estado, lo mejor es que desistas de esta insana práctica con toda celeridad. Son muchos los problemas que va a acarrear la salud de tu hijo y un pequeño esfuerzo por tu parte le va a ofrecer una vida llena de posibilidades.