Guardar las fotografías que hacemos a nuestros niños cuando son bebés es algo muy importante, sobre todo porque el tiempo pasa tan rápido que apenas podemos retener esa hermosa imagen en nuestra memoria durante unos años. Pronto van creciendo y aquel diminuto cuerpecito se convierte en un flamante adolescente que, en un descuido, ya nos ha sacado dos cabezas de altura.
Los libros deben formar parte del crecimiento de nuestro hijo desde, casi, el primer momento. Tener contacto con ellos, enseñarles el valor de sus páginas o compartir historias y aventuras imaginarias son también una forma de aprender muy valiosa, no solo educacionalmente si no también en sus emociones. Los libros son, por lo tanto, una pieza más del hermoso engranaje que conforma una infancia llena de emociones y estímulos con los que llegar a ser un adulto mucho más feliz y equilibrado.
Desde bien pequeños los niños necesitan de mil estímulos para aprender a desarrollar todo su potencial, tanto intelectual como imaginativo. La creatividad se vuelve, así, una de las herramientas más eficaces para avanzar en la vida, dándonos oportunidades con las que crecer de una manera sana y especialmente divertida. Juguetes, canciones, poemas y cuentos, pueden ser estupendos aliados del bebé que intenta buscar motivaciones nuevas en su alrededor.
Ya quedan solo unos días para que nos visiten los Reyes Magos. Posiblemente en todas las casas en las que hay niños se estarán escribiendo las cartas en las que piden sus deseos. Un peluche divertido, un juego de piezas grandes, un sonajero nuevo... los juguetes se convierten, durante estos días, en los auténticos reyes de la casa. Pero ¿qué os parece si, además de un bonito juguete, también incluimos un cuento con el que los peques desarrollen su imaginación?
Con la llegada del otoño se producen muchos cambios a nuestro alrededor. Incluso aunque vivamos alejados de la naturaleza, las ciudades cambian, el color del cielo se torna más gris y parece que todo acaba sumido en una extraña oscuridad que nos invita a refugiarnos en casa. También aparecen nuevos frutos y alimentos característicos de esta época, especialmente las castañas.
Ya hemos visto como dejar los pañales y aprender a controlas los esfínteres no es una tarea que resulta igual para todos. Lo que consiguen unos de forma muy rápida, otros en cambio les cuesta un poquito más. A veces los padres tenemos que buscar al "dios de la paciencia" para que esta tarea resulte lo menos dolorosa posible, y es que en todo cambio hay una gran parte de lucha.
Dejar los pañales no siempre es una tarea fácil, así que vamos a tener que ir buscándonos mil y un truco para convencerle de que ya es hora de dejar el "paquete" y empezar a usar el orinal. Algo que nos puede servir de mucha ayuda son los cuentos, ya hemos visto algunos títulos y ahora os vamos a ofrecer algunos más.
Quizás haya llegado el momento de tener que quitarle el pañal a tu bebé. La entrada a la escuela infantil suele ser el momento cumbre para todos aquellos que todavía lo necesitan, así que tendremos que ir buscando mil y una alternativa para que este cambio se realice sin demasiadas angustias. Un método que nos puede ayudar estupendamente son los cuentos.
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