
Ni la rectitud exagerada ni el amor anárquico es el modelo ideal para criar a nuestros hijos, el problema es que muchas veces lo olvidamos. Nuestros niños deben estar bien tratados. Pero entre la educación y la mala educación, criar o malcriar, hay una línea tan delgada que no siempre sabemos cuando y como la cruzamos.
Te brindaremos algunos consejos que puedes tener en cuenta para que ayudes a tu hijo a empezar a hablar. Lo fundamental es que los padres les hablen siempre a los pequeños desde que nacen. Hablarles mucho ayudará a que adquiera las primeras palabras.
Cuando los niños presentan problemas en la comunicación, bien por una dificultad física, psicológica o social, no hay nada mejor como utilizar los pictogramas. No en vano vivimos en una época llena de imágenes donde la parte visual juega un papel muy importante. Sólo tenemos que observar las comunicaciones en los chats o en la mensajería instantánea en la que, más que palabras, utilizamos los famosos emoticonos con los que demostrar nuestra opinión o estado de ánimo.
En varias ocasiones se ha discutido lo positivo o no del uso del chupete en los bebés. El uso del chupete, aunque puede calmar un momento de ansiedad o tristeza del niño, puede llegar a perjudicar al recién nacido a nivel físico e incluso psíquico, según diversos estudios que han dado dicha conclusión.
Cuando los niños son muy pequeños resulta, a veces, desesperante saber lo que quieren en cada momento. Apenas han aprendido unas pocas palabras y la única forma de comunicación es el llanto, especialmente cuando se sienten incomprendidos. Por eso es importante a mantener una comunicación fluida con nuestro bebé, ya incluso desde el vientre.
Bertín Osborne y su mujer Fabiola Martínez han creado una fundación a fin de ayudar a las familias con niños menores de tres años que sufren lesiones cerebrales. De este modo pretenden prestar los medios y el apoyo médico necesario para mejorar la calidad de vida de estos niños que tienen que enfrentarse a una cantidad importante de limitaciones en su día a día.
De acuerdo con un reciente estudio, el hecho de que los bebés tengan niveles significativamente altos o por el contrario, muy bajos, de manganeso en sangre, podría estar relacionado con cierto retraso en el desarrollo de funciones cerebrales, durante el primer año de vida. Esto no quiere decir que este oligoelemento, tan abundante en la naturaleza y los alimentos, sea la causa de este retraso y por eso se realizarán más estudios al respecto.
Continuando con el tema de la mentira infantil, recordemos que los padres deben estar atentos a diferenciar los momentos en que la mentira hace parte de una broma o un juego, y cuándo estas afirmaciones son producto de inseguridades o confusiones secretas que los niños se han guardado; cierto es que mentir es signo de poseer una gran imaginación y habilidades para crear y componer, pero esta no es razón para dejar pasar las mentiras, sin conversar con los pequeños y conocer sus razones para mentir.