
Abrigos para bebés en invierno: cómo elegir una prenda cómoda
El abrigo es una de las prendas que forma parte de los básicos del bebé en invierno. En definitiva, se convierte en el recurso perfecto para afrontar la temporada de frío.
El abrigo es una de las prendas que forma parte de los básicos del bebé en invierno. En definitiva, se convierte en el recurso perfecto para afrontar la temporada de frío.
Existen distintos productos que se utilizan de manera habitual en el cuidado del bebé. Uno de ellos es el que presentamos en este artículo. Este concepto hace referencia a un tipo de tela que está elaborada en un material ligero. Este producto puede utilizarse con distintos objetivos, por ejemplo, para arrullar al niño. La muselina posee una textura muy apetecible y, en consecuencia, aporta el máximo confort.
Parece que el frío ya ha llegado a la mayoría de ciudades españolas y viene para quedarse. Empieza la época en que podemos ver niños y bebés tan abrigados que no pueden ni moverse. ¿Cómo hay que vestir a los bebés y niños en invierno? Es fácil, con sentido común. Lo primero que debemos saber es que no se van a resfriar por pasar frío, es necesario que haya un virus cerca y por tanto alguien enfermo en la misma habitación que nuestro hijo. Sin contagio no hay catarro.
Abrigarse cuando estás embarazada de siete u ocho meses puede ser una tarea realmente difícil. Es posible que las chaquetas de antes te vengan en cuanto a pecho y hombros pero seguro que a la hora de abotonarlas la barriga siempre se queda fuera y estés incómoda. Yo solía apañármelas con chaquetas de lana que se estiran más pero aún así siempre tenía que dejar algún botón sin abrochar. También es verdad que donde vivo el clima es bastante benevolente y no hace falta mucho abrigo para pasar el invierno.
El Síndrome de Muerte Súbita del lactante (SMSL) es una preocupación constante no sólo para los padres, también para los investigadores. Por ello de vez en cuando van apareciendo nuevas recomendaciones para que intentemos minimizar su efecto. Un nuevo estudio, a pequeña escala ha descubierto que envolver a los bebés para dormir puede favorecer el SMSL. Esto ocurriría principalemente en aquellos que no estaban acostumbrados y con los que se inicia la práctica sobre los tres meses.