Soy Padre: De nuevo, suciedad

Soy Padre: De nuevo, suciedad

Escrito por: Ildefonso Gómez    16 marzo 2016     2 minutos

Ya sabéis, tal y como he comentado en más de una ocasión, que no me gusta que el niño esté en contacto con la suciedad. Por mínima que esta sea. De hecho, en casa realizamos todo tipo de esfuerzos con el fin de evitarla. Y, como ya habréis averiguado según las últimas entradas, el pequeño está en una de sus etapas más activas: se mueve continuamente, grita, intenta hablar, intenta ponerse de pie y andar, etc. Todo eso, evidentemente, da lugar a una serie de peligros relacionados con la suciedad.

Una de sus manías más curiosas es la de tirar todos los objetos al suelo. Tanto los chupetes como los juguetes y, en definitiva, todo lo que llega a sus manos. Es evidente que, al llegar al suelo, las cosas entran en contacto con la suciedad. Y yo, que a veces me considero un poco maniático, estoy continuamente limpiando todo lo que tira. Sin ir más lejos, hace unos días era darle el chupete recién lavado y tirarlo al suelo casi al instante.

En todo caso, siempre me hago la misma pregunta: si yo mismo cuando era pequeño enredaba con todo tipo de elementos en el campo y he llegado a adulto sano y salvo ¿debo tener tantas precauciones? Refirámonos de nuevo a un estudio del que ya hablé hace semanas.

¿La suciedad puede ser buena?

Soy Padre: De nuevo, cuidado con la suciedad

Hace unas semanas explicaba que gracias a un estudio se averiguaba que los niños que creían con animales podían llegar a estar incluso más sanos que los que no lo hacían. Pues bien, la idea a la que quiero llegar es la misma: cuando los niños son pequeños y están en desarrollo, se ven expuestos a una serie de microorganismos que, a la vez, aumentan su capacidad defensiva de cara al futuro. Los elementos llegan a su cuerpo, pero es este mismo el que lucha contra ellos, generando las defensas suficientes como para enfrentarlos con éxito siempre que se acerquen.

Es evidente que no hay que dejar que los niños se ensucien en extremo. Sin embargo ¿quién no se ha manchado de barro en alguna ocasión? ¿qué niño no ha cogido algún objeto, incluso de la calle, que tenía polvo? Y al final no ha pasado nada.

La próxima vez que el niño tire el chupete al suelo o cualquier objeto, tengo claro que lo seguiré limpiando. Trabajaré para que todo esté impoluto. En todo caso, sé que en alguna ocasión cogerá sucio o que, incluso, los «gérmenes» están en el ambiente. Su cuerpo se deberá acostumbrar a los peligros que en el aire. La limpieza no faltará aunque la suciedad siempre esté a la vuelta de la esquina.

Fotos | FlickR – daily sunny | FlickR – Alec Mills


3 comentarios

  1. Jose dice:

    Si de verdad quieres preservar a tu bebe de gérmenes y bacterias la limpieza de tu casa tiene que ser muy en profundidad y hasta el mínimo detalle, yo cuando nació la peque compare precios y servicios y contrate una empresa de limpieza http://www.limpiezasexpress.com , sin duda fue un acierto

  2. Celia dice:

    La verdad es que me parece muy exagerado no dejar que entre en contacto con nada sucio, pero es un tema personal. En nuestra casa nuestros hijos se están criando rn el suelo con dos perros y de momento no se han puesto nunca malos ni tienen alergias. De todas formas a mi cuñada le pasaba lo mismo y cada cierto tiempo (creo que una vez al mes) contrataba a una empresa de limpiezas especiales que le desinfectaba por completo toda la casa. Desde mi punto de vista es demasiado, pero allá cada uno!

  3. CJP dice:

    Estaba acordándome ahora de este artículo y pensando en lo mal que lo estarás pasando ahora que los gérmenes son tan peligrosos… Aprovecho también para daros alguna idea para estos días de confinamiento. Nosotros tenemos una mudanza pensada para cuando acabe el confinamiento y estamos organizando el vaciado del piso con ayuda de los peques. Así van aprendiendo a conservar aquello imporatne y desacerse de lo innecesario. Un saludo!