Shiatsu y Reiki para ayudarnos durante el embarazo

Shiatsu y Reiki para ayudarnos durante el embarazo

Escrito por: Sacra    15 diciembre 2009     2 minutos

Cada vez son más las técnicas alternativas que vamos conociendo y poniendo en práctica para la mejora y mantenimiento de nuestra salud. Se trata de expresiones naturales y, en la mayoría de casos, milenarias que han ido transcendiendo a través de la historia y que ahora, de una forma totalmente necesaria para el equilibrio en el ser humano, vuelven a ocupar el lugar importante que merecen. Ya hemos visto, en ocasiones anteriores, como el yoga o el pilates, por ejemplo, pueden conseguir que nuestro cuerpo no sufra demasiado durante el embarazo.

El Shiatsu y el Reiki son disciplinas orientales importadas directamente desde Japón y que favorecen, entre otras cosas, la relajación durante el embarazo. Aunque eso sí, en principio no tiene porque existir una contraindicación, siempre debemos consultar con nuestro ginecólogo y asegurarnos de que el monitor es de total confianza y va a aplicarnos las técnica como es debido.

El Shiatsu es un masaje japonés en el que el terapeuta presiona los puntos energéticos de nuestro cuerpo para, de este modo, equilibrar el organismo. Suele trabajar todo el cuerpo pero, en este caso, se detiene mucho más en la espalda, las rodillas, los tobillos o las extremidades. Su beneficio principal consiste en que al presionar los músculos equilibra el sistema nervioso y favorece la relajación. También nos va a ayudar a reforzar el sistema inmunológico, mejora la circulación sanguínea, evita los calambres en las piernas y los dolores de espalda. No existen contraindicaciones lo único que a partir del tercer mes hay ciertos puntos, como el abdomen, que no deben presionarse.

El Reiki, también es una técnica milenaria japonesa, consiste en utilizar las manos para transmitir energía a través de los centros energéticos del cuerpo o, también llamados chacras. De este modo se sigue desbloquear esos puntos energéticos dejando que la energía fluya con toda libertad. Durante estas sesiones se suele poner música suave por lo que, en el embarazo, suele aportar gran sensación de paz y relajación, desterrando la ansiedad, el estrés y ayudándonos a dormir mejor. También ayuda a reforzar el sistema inmunológico y reducir las molestias de estómago y dolores de cabeza. El Reiki, además, es beneficioso para el desarrollo físico y emocional del bebé, según cuentan, aquellos bebés tratados con esta técnica son más tranquilos y equilibrados emocionalmente.

Vía | Ser Padres