Salvajadas con bebés a la orden del día

Salvajadas con bebés a la orden del día

Escrito por: Mónica M. Bernardo    30 noviembre 2010     2 minutos

Aunque parezca mentira no me gusta escribir sobre las tragedias provocadas que le ocurren a los bebés. Sin embargo, pasan con demasiada frecuencia, me atrevería a decir que todos los días se encuentran titulares de barbaridades sucedidas a pequeños que acaban de nacer o llevan tan sólo unos meses o pocos años en este mundo.

Y la verdad es que no acierto a entenderlo. Un día un amigo trato de convencerme de que se trata de casos extremos que se leen, de vez en cuando, en el periódico. Pero, obviamente, no lo consiguió. Hoy mismo, sin ir más lejos, ojeando dos o tres rotativos, no más, nos encontramos con verdaderas salvajadas. Les hago un resumen de lo publicado.

«La muerte del bebé en Ferrol se investiga por un presunto homicidio», «Abandona a su bebé por irse con el vecino», «Mata a su bebé porque le despertó de la siesta«, «Coge en brazos a su bebé para evitar ser detenido», «Comienza el primer juicio por el robo de un bebé en la dictadura»… Estos son algunos de los titulares sobre maltrato infantil, que no todos.

Hace nada les contábamos de un bebé con 15 meses que ha muerto a causa de los malos tratos, y además quien lo hizo lo grababa. Bebés que se compran y se venden, una madre que pega a su hijo a la pared con cinta adhesiva por pura diversión, etcétera. Sin embargo, solo uno de cada decena de casos de malos tratos se detecta.

Cuando empiezas a leer cualquiera de estas noticias, a la gente normal, con sentimientos, que tiene hijos (incluso si no los tiene) o que aprecia a los niños, se le abren las carnes. Personalmente, nunca he podido comprender cómo se le puede hacer daño a un bebé. A un ser indefenso que no ha tenido tiempo de hacer mal a nadie.

Mucho menos puedo alcanzar a comprender cómo se le puede hacer daño a tu propio bebé. Carne de tu carne, sangre de tu sangre. Hay quien trata de justificarlo con argumentos del tipo: ‘es que es muy joven’, ‘claro con la pareja que tiene’, ‘no si es que es un tarambana’, ‘si dejara el alcohol otro gallo cantaría’.

Argumentos que a mí no me valen. Tener un hijo es una gran responsabilidad. Si lo has querido tener y ahora no puedes con él, haz algo al respecto pero no sigas adelante ni hagas nada de lo que te puedas arrepentir. Si nunca has querido tenerlo y has seguido con el embarazo hay muchas opciones. Infórmate antes de amargarle la vida al bebé o amargártela tú mismo.

¿Qué hay que hacer para evitar más noticias de este tipo?

Foto | Que dificil es ser yo