Receta para el bebé: Papillas para la merienda

Receta para el bebé: Papillas para la merienda

Escrito por: Sacra    17 enero 2010     2 minutos

A pesar de la gran variedad que podemos ofrecerle a nuestro bebé en las papillas de sus primeros meses de vida, lo cierto es que hay veces que acabamos siendo repetitivas, como si la imaginación acabara por agotarse y la enorme variedad de alimentos de los que podemos echar mano, se limitaran a los tres o cuatro de siempre. Es aquí cuando tenemos que pensar que es entonces cuando estamos educando el paladar de nuestro niño y ayudándole a probar nuevos sabores y texturas que, más tarde, serán vitales para su desarrollo alimentario.

Por eso hoy os proponemos tres papillas que contienen alimentos vitales y nutritivos para vuestro bebé y que, seguro, le van a encantar. Son ideales para ofrecérselas a partir de los 9 nueve meses y durante la merienda ya que contienen leche, fruta y cereales.

  • Papilla de sémola con melocotón. Ingredientes: 200 mililitros de leche adaptada, 3 cucharadas de sémola, 1 cucharadita de cacao en polvo y 1 melocotón. Calentamos la leche y añadimos la sémola y el cacao, llevar a ebullición y dejar hervir durante tres minutos, removiendo constantemente. Escaldar el melocotón, pelarlo y cortar en taquitos. Poner la papilla en un bol y mezclarla con el melocotón.
  • Papilla de pan tostado. Ingredientes: 200 mililitros de leche adaptada, 3 rebanadas de pan y 1 trozo de melón. Tostamos el pan y lo desmenuzamos con la mano en trozos muy pequeños. Calentamos la leche y la echamos por encima del pan, que lo tendremos desmenuzado en un bol. Añadimos el melón cortado en trocitos muy pequeños.
  • Papilla de sémola y fresas. Ingredientes: 90 gramos de sémola, 50 gramos de fresas y 1 cucharada de aceite. En una olla ponemos 90 gramos de agua e iremos añadiendo, poco a poco, la sémola moviendo constantemente con las varillas hasta que hierva. La retiramos del fuego y dejamos reposar para que la sémola absorba todo el líquido. Mientras tanto lavamos las fresas y las cortamos en trozos pequeños, añadimos la sémola y el aceite y lo pasamos todo por la batidora. Esta papilla necesita algo de grasa, como es el aceite, para saciar al niño, ya que sin ese aporte calórico, pronto tendría hambre de nuevo. Puedes sustituir las fresas por cualquier otra fruta.

Vía | Ser Padres