Una proteína responsable de algunos casos de infertilidad

Una proteína responsable de algunos casos de infertilidad

Escrito por: Belén    23 julio 2011     2 minutos

Se considera que una pareja es infertil (no estéril) cuando tras un año manteniendo relaciones sexuales sin protección, no han logrado el embarazo. Es algo que le sucede al 15 por ciento de los que lo intentan. El problema es en la misma proporción de ellas y ellos, pero, en el caso de los hombres en un 70 por ciento de las ocasiones se desconoce el motivo de la infertilidad.

Una investigación publicada en Science Translational Medicine apunta a una proteína, la DEFB126, como responsable de muchos casos de infertilidad masculina. La proteína tiene dos funciones, facilitar la penetración a través de la mucosa cervical y promover la penetración al óvulo. Un 50 por ciento de los varones portan una mutación en los genes que codifican esta proteína, de ellos el 20 por ciento tiene una doble mutación. Estos últimos son los que más problemas tienen para concebir.

La doble mutación no impediría la concepción aunque la dificulta en un 60 por ciento. Los autores no entienden porque no se ha extinguido esta doble mutación y creen que podría haber alguna ventaja evolutiva en ella que aún no han descubierto.

La investigación necesita apoyarse en nuevos estudios con una cohorte más grande y que dure más tiempo. Si se realiza y se confirma el hallazgo en el futuro podría ser una guía para tratar algunos casos de infertilidad masculina. Steve Rozen, de la Facultad de Medicina de Singapur, explica, «Se puede tratar el esperma para restaurar la versión buena de la proteína, pues en trabajos previos los investigadores han demostrado que, en monos, es posible aislar y reparar la DEFB126. Aunque es demasiado pronto para predecir cómo este descubrimiento va a afectar a los tratamientos y técnicas de reproducción asistida sí parece claro que abre una nueva vía que hay que investigar«.

Al menos algunos hombres tendrán respuesta a su infertilidad, la falta de ella es desesperante.

Vía | El Mundo
Foto | International Business Times