Cómo decorar la habitación del bebé en un piso alquilado

El proyecto de decoración del dormitorio de un bebé siempre debe situarse en un contexto más amplio. Por ejemplo, las circunstancias cambian cuando el espacio es alquilado de forma temporal. Existen varios factores que conviene analizar en ese caso.

1. Revisa las condiciones del contrato de alquiler

Dicho documento contiene todas las cláusulas relativas al acuerdo formalizado con el propietario del inmueble. Conviene repasar esta información para revisar la información clave. Aunque si valoras la posibilidad de hacer alguna modificación más significativa, habla con el casero. Tal vez podáis llegar a un acuerdo. Pero es importante no dar ningún paso que pueda ir en contra de su propio criterio como propietario.

2. Presupuesto perfectamente calculado

Cuando la permanencia en un entorno se percibe como temporal, la inversión realizada en decoración se centra en el corto o medio plazo. Por ello, realiza un presupuesto ajustado. Compara una gran selección de productos y muebles de bebé. La búsqueda de diferentes alternativas puede ayudarte a decorar una estancia bonita y económica.

3. Elige un punto focal en la habitación del bebé

No importa que el inmueble sea comprado o esté en alquiler. Cualquier habitación infantil necesita un elemento principal. Pero la elección del punto focal se contextualiza en un espacio que presenta unas condiciones específicas. Por ejemplo, si la vivienda es alquilada, conviene elegir un punto focal que ya forma parte de la estética del dormitorio o un elemento que se añade con facilidad. Ten en cuenta que en este caso no se dan las circunstancias deseadas para realizar una transformación integral.

4. Juega con los textiles

Sus texturas, colores o estampados aportan nuevas sensaciones y perspectivas al entorno. Son tejidos esenciales para crear una atmósfera agradable y acogedora en el cuarto del bebé. Son productos a los que podrás dar una nueva vida en el futuro aunque tengas que afrontar una próxima mudanza.

5. Cuida los detalles

Decorar a través de los detalles se convierte en la fórmula perfecta para personalizar una habitación de alquiler. Las letras decorativas, por ejemplo, sirven para enmarcar la habitación del peque con su nombre. Del mismo modo, las cestas de mimbre se integran en cualquier mueble, aunque también quedan perfectamente cuando se sitúan a la vista. Son ideales para reforzar el sentido del orden y la organización en el cuarto. Las guirnaldas son tendencia en la decoración de paredes. Aportan un resultado estético muy llamativo. Las láminas infantiles, por su parte, pueden apoyarse sobre un mueble bajo o completar una estantería.

6. Piensa qué harás después con esos muebles

La posibilidad de una mudanza próxima se presenta como viable en un piso de alquiler. Las decisiones de compra que tomes en este momento pueden integrarse en un contexto más amplio si contemplas un plan B. Por ejemplo, tal vez decidas que esos muebles formarán parte de un próximo hogar que comprarás en propiedad. A lo mejor son diseños que puedes vender en tiendas de segunda mano cuando este periodo llegue a su fin. O quizá decidas guardar ese material en un trastero de alquiler.

En definitiva, disfruta de este proceso creativo, pero sin perder de vista que el espacio en el que se ubica la estancia es alquilado.

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