Cómo calmar la sensación de soledad en el postparto

Cómo calmar la sensación de soledad en el postparto

Escrito por: Maite Nicuesa Guelbenzu    28 marzo 2021     2 minutos

La etapa del postparto puede estar acompañada por el sufrimiento que produce la sensación de soledad en madres y padres que, además, se sienten agotados

El ser humano experimenta constantes contradicciones en distintas etapas de la vida. Después del nacimiento de un bebé, por ejemplo, la madre también puede experimentar una sensación de soledad interior a pesar de tener tan cerca a ese ser tan especial. Esta es una etapa de intensos cambios ante los que cada persona necesita elaborar su proceso de adaptación y de aceptación.

Aceptación para dejar ir aquellos aspectos que quedaron en el pasado y para abrazar la nueva realidad del presente. La sensación de soledad es una de las consecuencias emocionales que es posible vivir en este periodo.

Tiempo al tiempo

Generalmente, esta sensación desaparece de forma gradual. En caso de que el malestar interior persista, es importante pedir ayuda especializada para evitar que la situación se prolongue. En esta circunstancia, aumenta el riesgo de sufrir los síntomas de una depresión postparto. Sin embargo, la soledad también se intensifica cuando no se comparte. Porque, en ese caso, la persona se siente alejada de una visión idealizada de la maternidad que observa en otras mujeres. Al dar voz a este sentimiento, es habitual comprobar que otras madres se sienten de un modo similar o han experimentado este tipo de vivencia.

Esta es una etapa en la que la atención principal gira en torno al cuidado y bienestar del bebé. Y la soledad aumenta cuando la persona se distancia de su propio autocuidado. Las circunstancias externas pueden dificultar esta atención hacia una misma. Tener una red de apoyo en este momento es muy positivo para la familia, aunque no todas las madres tienen el mismo nivel de acompañamiento.

Soledad Postparto

Cuidar el diálogo interior

La soledad en el postparto es una sensación posible y muchos momentos reflejan un diálogo interior que está alineado con esta sensación de carencia. Aunque la soledad pueda resultar incómoda, es importante no establecer una identificación con dicho estado de ánimo. La realidad de la madre es más rica en matices que una sensación que no le define de forma absoluta.

Es positivo escuchar y validar las emociones y los sentimientos. En esta etapa puede producirse un choque entre las expectativas imaginadas antes del nacimiento del niño y la realidad posterior de un momento que presenta dificultades que no habían sido previamente contempladas.

En esta etapa de la vida surgen lazos especialmente sólidos con otras personas que se encuentran en una situación similar. Este escenario de vivencias compartidas, aunque diferentes, crea una empatía entre quienes establecen un diálogo terapéutico. La sociedad ha avanzado hacia un mayor individualismo que también se percibe en la soledad con la que madres y padres viven una nueva etapa de un modo diferente al que lo hicieron generaciones previas. La palabra soledad adquiere una mayor visibilidad en la actualidad.


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