Más datos negativos: Un bebé adicto a los analgésicos nace por hora

Más datos negativos: Un bebé adicto a los analgésicos nace por hora

Escrito por: Sergio López    7 julio 2012     2 minutos

Dato obtenido en Estados Unidos.

Añadimos este post, ampliando el fenomenal artículo de nuestra compañera Leticia en el mes de mayo. Un nuevo estudio del «Journal of the American Medical Association» revela que en Estados Unidos nace cada hora un bebé con adicción a algún tipo de medicamento, previamente consumido por su madre. En la última década, esta adicción se ha triplicado en número con respecto a los recién nacidos. Los analgésicos y los calmantes son los medicamentos que más síndrome de abstinencia neonatal generan.

En el año 2011, más de tres de cada mil niños nacen con esta adicción. La falta de sensibilidad o de información de las futuras madres y la corta información que pueden recibir en este punto por los especialistas pueden motivar a ello. Este último punto está siendo muy criticado en el continente americano por el senador demócrata Charles Shumer.

El senador Shumer ha criticado también el no ser más explicito en las especificaciones de los medicamentos en relación al riesgo de las embarazadas, y pide que la Dirección Federal de Medicinas y Alimentos tome cartas en el asunto y obligue a advertir en los productos medicinales las contraindicaciones y el riesgo que puede sufrir el bebé ante la tomas de determinados fármacos.

Las consecuencias que pueden afectar al bebé pueden ser varias. Desde tener un tono muscular más elevado de lo normal (hipertonía) hasta intolerancia a los alimentos, carácter irritable, convulsiones y dificultades para respirar. Eso sin contar el riesgo de nacer prematuramente, con lo que eso conlleva. Los tratamientos a posteriori son bastante caros, por lo que es recomendable no hacer nacer el problema junto al bebé.

Al igual que en Estados Unidos, en España también tenemos ese problema. Quizás no tan acusado, pero puede llegar a serlo si no le ponemos remedio. Una vez más, hay que advertir para no poner en juego la salud de un recién nacido. No se debe poner en peligro la vida de un bebé. No debemos traerlo al mundo para eso.

Vía | El Mundo