En los últimos tiempos los estudios científicos se están centrando en el desarrollo del bebé en el vientre materno y el impacto, que ciertos hábitos, consumos o circunstancias del nacimiento, provocan en su salud y que le acompañarán durante toda su vida. Pero poco se ha descubierto sobre la flora intestinal, a la que apenas se le ha dado importancia, y que no sólo es la responsable de trastornos digestivos, también tiene una responsabilidad en enfermedades más importantes.
Con la llegada de un bebé a casa, sobre todo si es el primero, son muchos los componentes nuevos que vienen con él. Objetos, enseres y artículos necesarios para su cuidado que antes de venir él no existían en nuestro hogar. Algunos, especialmente aquellos que tratan sobre la limpieza, acaban convirtiéndose en clásicos, por lo que aunque nuestro niño crezca, incluso se convierta en adulto, esos objetos seguirán permaneciendo en nuestra vida y haciendo una importante labor.
Saber comunicarnos con nuestro bebé es fundamental para su feliz desarrollo. Pero ¿cómo lo hacemos si todavía no sabe hablar o sus expresiones son limitadas? A lo largo de estos últimos años, la idea de que nuestros niños parece que vegetan a lo largo de estos primeros meses, ha cambiado totalmente. Los padres, más conscientes de las necesidades de nuestro bebé, ya no sólo físicas sino también emocionales, buscan la manera de entrar en contacto con él, haciéndole saber que estamos ahí para amarle y protegerle de forma incondicional.
En nuestro repaso a lo largo de las enfermedades que pueden ser transmitidas, de generación en generación, a través de nuestra estructura genética, nos encontramos hoy con el Síndrome de Marfan, que es conocida también como la enfermedad de las personas altas. Su característica física más impactante es el excesivo alargamiento de sus miembros, tanto piernas como brazos.
Nos lo contaban nuestros compañeros de La Cosa Rosa el pasado lunes, haciéndose eco de la llegada al mundo de un nuevo niño de padres famosos. Nada más ni nada menos que de Nicolás, el hijo de la presentadora de televisión Anne Igartiburu y el director de orquesta Pablo Heras-Casado. Un bebé que, como su madre dice, "Una bendición que trae felicidad y luz a la casa".
De sobra son conocidos los beneficios que aporta la lactancia materna en la salud del bebé. Miles de estudios científicos han demostrado que su contenido proteico, así como el íntimo contacto con la madre, ayuda a mejorar su salud, no sólo física, sino también psíquica y emocional. Pero estos estudios, siguen realizándose con el fin de continuar concienciando a las madres para que den a sus bebés, al menos durante los primeros meses, y tal como recomienda la OMS, la leche materna.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) acaba de realizar un minucioso estudio para examinar la calidad de las cremas solares que utilizamos para nuestros niños. Esta organización es experta en valorar y someter a exámenes esos productos que circulan en el mercado y que, de forma especial, es indicado para los más pequeños. No debemos olvidar que no todo lo que se vende bajo el lema de uso infantil es adecuado para ellos. Así que debemos especial cuidado.
La Iglesia Católica dedicada cada uno de los días del calendario a celebrar las onomásticas de sus distintos santos y santas. Si bien siempre se destacan los más conocidos, seguro que te sorprenderá conocer el nombre de muchísimos de ellos que apenas son nombrados.