Ya está aquí el verano, la piscina y la conjuntivitis

Ya está aquí el verano, la piscina y la conjuntivitis

Escrito por: Sacra    11 julio 2009     2 minutos

Las infecciones oculares son bastante frecuentes durante la infancia y de todas ellas la conjuntivitis es la que más prolifera. Con la llegada del verano y las visitas a la piscina, esta dolencia puede resultar más habitual de lo normal. Por eso es importante que lo observemos detenidamente si notamos que se frota los ojos sin tener sueño o estar aburrido y si se queja por el picor.

Podemos reconocer perfectamente la conjuntivitis si existe una inflamación de la capa externa del ojo que cubre el globo ocular y la parte interna de los párpados. Esto provoca picor y como si tuviera arenilla en las retinas. Si además los ojos aparecen rojos y con legañas, entonces no hay duda, se trata de una conjuntivitis. Pero también existen distintos tipos y, por lo tanto, diferentes formas de tratarlas. Aquí te damos algunas claves para que puedas diferenciarlas.

  • La irritativa es la más frecuente en esta época ya que son provocadas por el cloro u otros desinfectantes que añaden a las piscinas. En principio sólo provocan irritación aunque, también, pueden favorecer la entrada de gérmenes. Lo mejor, a parte de ir al pediatra para su tratamiento, es ofrecerles a los pequeños las gafas de buceo para evitar complicaciones.
  • La alérgica. Se da más sobre el mes de junio, con la proliferación del polen. Generalmente la suele ir acompañada de rinitis. El mejor tratamiento es el colirio con corticoides.
  • Infecciosa. Es la más común y está provocada por un virus o una bacteria. Es muy contagiosa. Si la secreción es clara se trata de una infección vírica y si es amarillenta o verdosa, se tratará de una conjuntivitis bacteriana. El tratamiento es distinto para cada caso.

Aunque la conjuntivitis es muy molesta no debe provocar dolor. Si tu niño se queja y notas que siente una sensibilidad especial a la luz, es posible que padezca algún tipo de afección ocular más grave. La mayoría de ellas pueden ser provocadas por una exposición prolongada al sol, por eso intenta evitar llevarlo a la piscina en las horas más peligrosas de calor y, por supuesto, no olvides sus gafas de sol.

Vía | Guía del niño
Foto | Photobucket


un comentario

  1. Alvaro dice:

    Bueno parece que ya estamos otra vez en verano, y siempre con los mismo problemas en la piscina, agua verde, con olor y demás.

    El problema de la irritabilidad normalmente se debe a un pH desajustado y por consecuencia tener que añadir más cloro erróneamente, ya que eso aumenta la concentración de cloro y sin lograr desinfectar y aumentando las probabilidades de irritación y enrojecimiento de los ojos.

    Sobre esto hay muchas ayudas e ideas en http://www.forodepiscinas.com/index.php

    Espero que os sirva y encontréis más ayuda.
    Saludos y buena web!