La hora del baño es un momento muy especial para los bebés. Un momento de relax, bienestar y juego. Existen diferentes tipos de bañeras que se adaptan al tamaño del niño. En Uno más en la Familia presentamos seis formatos frecuentes.
Si la planificación es relevante en cualquier área de la vida, se intensifica todavía más tras la formación de una familia. La planificación también se materializa durante el periodo de embarazo a través de distintas medidas. El plan de parto atiende a las preferencias y expectativas de la madre.
Cada familia dispone de su propia forma de organización del tiempo. En cada hogar existe una infraestructura que propicia la búsqueda de la conciliación. Sin embargo, la estrategia adoptada puede verse alterada en situaciones de emergencia. Pueden existir numerosos imprevistos ante los que sea necesario contar con un plan B para atender al niño.
Existen distintas etapas en la maternidad. El periodo preconcepcional pone de manifiesto el deseo de planificar un embarazo. En este contexto temporal se lleva a cabo la consulta preconcepcional.
Los cuidados prenatales propician el bienestar integral de la embarazada. Este cuidado se mantiene a lo largo de todo el embarazo, por tanto, existe un seguimiento que fomenta la promoción de la salud. La persona se siente acompañada a lo largo de una etapa en la que, además, tiene la posibilidad de consultar sus dudas con aquellos especialistas que le atienden.
El universo de la maternidad y la paternidad también nos permite descubrir nuevos términos que se contextualizan en este ámbito. Uno de ellos, relativo al niño, es el concepto bebés de alta demanda. Un término que hace alusión a una circunstancia concreta en el comportamiento del pequeño al cuantificar el nivel de atención que precisa mediante la referencia a esta “alta demanda”.
Uno de los tragos más complicados a los que pueden enfrentarse los padres de un recién nacido es a un diagnóstico desfavorable para su salud. Desgraciadamente los problemas neurológicos son los más complicados de detectar a temprana edad, ya que, en la mayoría de casos, no son visibles y se encuentran agazapados entre las miles de conexiones cerebrales del bebé. Sin embargo, su detección temprana serviría para poder poner los medios adecuados, y si no es posible dar la solución, al menos paliar sus efectos.
Los avances de la medicina, en los últimos años, han dado un paso de gigante en torno a los nacimientos que se producen antes de tiempo. Se considera como partos prematuros aquellos que se producen antes de la semana 37 de la gestación. Precisamente esas últimas semanas son decisivas para la formación completa del bebé y el perfecto desarrollo de todos sus órganos, por eso en muchos casos se necesita de cuidados extras para que el pequeño no arrastre secuelas de salud para toda la vida.
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