Rechazo al recién nacido

Rechazo al recién nacido

Escrito por: Leticia   @leticiadelpino    21 febrero 2012     2 minutos

Adaptarse al nacimiento del bebé.

El nacimiento de un hijo puede mover muchas estructuras familiares, por más buscado y deseado que sea el pequeño. Muchas veces las madres no saben que hacer ni como responder ante sus demandas, teniendo la necesidad de construir un vinculo.

Algunos padres ante la llegada de su hijo pasan por períodos de confusión con el miedo típico de si serán buenos padres, si tendrán buena salud sumando la incorporación de nuevos roles y responsabilidades. Para la construcción del vínculo solo necesitaremos ver como transcurre día a día, disfrutando de las cosas cotidianas, recordando lo que el pequeño necesita contacto físico, la mirada de su madre, los mimos de sus padres.

Las primeras etapas no siempre se dan fácilmente, además suelen presentarse diferentes a las que soñamos durante el embarazo, enfrentándonos con todo lo que hemos ido construyendo en nuestras mentes con respecto a la maternidad y teniendo como ejemplo concreto nuestra propia crianza.

Por eso y en base a las vivencias personales algunas madres sienten cercanía al bebé, sienten la necesidad de cuidarlo y alimentarlo pero no sienten ese amor profundo que surge naturalmente en otros casos. Al sentirse así puede aparecer un fuerte sentimiento de culpa.

En estos debemos recordar que el vinculo se ira construyendo y que el acto del nacimiento incluye dos procesos: en primer lugar se debe reconocer al pequeño como un ser independiente de ella y la importancia de amar al pequeño con sentimiento fraternal.

Si tenemos en cuenta esto podemos transitar las primeras etapas como una forma de adaptación, aprendizaje mutuo y reconocimiento. El tiempo debe ser de intimidad: madre, padre, hijo descubriéndose y teniendo más sensación de confianza y seguridad.

Vía | Saludable
Foto | Flickr – Roger Schultz