Receta para bebés: Crema de coliflor

Receta para bebés: Crema de coliflor

Escrito por: Sacra    28 noviembre 2012     2 minutos

La coliflor es un excelente alimento lleno de fibra, vitaminas y minerales, y resulta ideal tanto para los niños que empiezan a probar sus nuevos sabores en la cocina, como para las embarazadas, ya que contiene importantes dosis de ácido fólico

Ya estamos viendo como hay una gran variedad de recetas sencillas y muy nutritivas que podemos ir ofreciendo a nuestro bebé desde los primeros días. El cambio en su alimentación irá produciéndose de forma escalonada, así que lo mejor es seguir los consejos e indicaciones del pediatra, ya que él sabe perfectamente como ir acostumbrando a nuestro pequeño a este festival de nuevos sabores.

Las cremas, sin duda, son la mejor opción para ir, a partir de los seis meses, más o menos, dándole a conocer nuevos sabores. Así hoy nos encontramos con una deliciosa crema, apta para toda la familia, cuya base fundamental es la coliflor, alimento lleno de propiedades y grandes beneficios, en especial para los niños y las embarazadas. Su realización es muy sencilla, aquí te ofrecemos los pasos a seguir.

Ingredientes: 250 gramos de coliflor, 200 gramos de patata, 1 puerro, 1 nabo blanco, 1 cebolla y 1250 centilitros de agua o caldo vegetal.

Modo de hacerlo:

  • Lo primero que vamos a hacer es pelar y trocear bien las verduras, y bien lavadas para que no quede ningún resto. Y las colocamos a hervir en el agua o caldo vegetal. El tiempo puede variar dependiendo lo grande que sean los trozos, pero puede estar alrededor de los 45 minutos, hasta que veas que están tiernas.
  • El siguiente paso es triturarlas bien, hasta formar una crema consistente, sin tropezones y que quede en su textura exacta (ni muy aguada ni demasiado espesa).
  • Si el bebé tiene más de 9 meses puedes añadirle un poquito de sal o un quesito o una pizca de nata líquida. Así la crema quedará más sabrosa.
  • Con la cantidad que os hemos indicado, pueden salir 4 raciones. Si solo van a ser para consumo del bebé, puedes separarlas en tarritos y conservarlas en el frigorífico o congelarlas, así ya las tendrás preparadas para otro día.

Fuente | «La alimentación infantil» de Assumpta Miralpeix (Plaza & Janés editores)
Foto | Opinión Málaga