Posturas para el parto vertical

Posturas para el parto vertical

Escrito por: Manzano Azul    28 marzo 2010     2 minutos

A pesar de ser la posición que se generalizó dentro del mundo de los hospitales, dar a luz acostada no es la única alternativa disponible; antiguamente, dar a luz de manera vertical se consideraba lo normal, ya que favorece el aumento de los diámetros pélvicos, la eficacia de las contracciones y según estudios, resulta menos doloroso.

Dar a luz acostada, con las piernas abiertas, es una costumbre que data del siglo XVII, y cuya práctica se atribuye al famoso obstetra Mauriceau, quién al parecer buscaba facilitar la utilización de los fórceps en los partos complicados. Poco a poco se ha ido complejizando la hora del parto, siempre con las mejores intenciones de garantizar la supervivencia de la madre y del bebé.

En cuanto al parto vertical, también llamado “natural”, se considera más humanitario, por permitir a la madre estar en mayor contacto con el bebé durante el proceso y sufrir menos. Esta posición aumenta los diámetros pélvicos, y favorece la producción de oxitocina endógena, por la presión que ejerce la cabeza del bebé sobre el cuello del útero.

Sin embargo, este tipo de partos tienen también una tasa más elevada de posibles desgarros, y si bien, se hizo costumbre por generaciones el hecho de parir acostadas, las mujeres en occidente se han hecho menos fuertes de las piernas para mantenerse de pie por tiempo prolongado y poder dar a luz cómodamente así.

Otra alternativa es el parto en cuclillas, donde la mujer es sostenida por las axilas por otra persona; esta posición sería la más natural y habitual en culturas ancestrales, ya que se reproduce en pinturas y grabados antiquísimos, en diferentes partes del mundo. También es muy antigua la silla de partos, que solía ser fabricada en madera o porcelana, donde la mujer se sienta como si estuviera en el inodoro, para ejercer presión más cómodamente en cada contracción.

El estilo de parto debe ser elección de cada madre, según se sienta más cómoda y segura, ya que no a todas las mujeres les favorece el mismo procedimiento por sus condiciones físicas; seguramente el obstetra podrá aclarar las dudas en cada caso y sugerir a la madre cuál sería la manera más indicada de afrontar el parto, de acuerdo a sus deseos y posibilidades.

Vía | Cosas de bebés
Foto | Guía peques