Perú: esterilizar a la fuerza

Perú: esterilizar a la fuerza

Escrito por: Leticia   @leticiadelpino    30 diciembre 2011     2 minutos

La maternidad no parecia ser un derecho hace algunos años en Perú.

Muchas peruanas fueron esterilizadas a pesar de su voluntad. Recientemente hemos hablado acerca de lo que sucede en diferentes culturas en donde estar embarazada de una niña no es un hecho feliz, tomándose como una vieja costumbre muy triste para muchas mujeres, hoy nos referiremos a lo que sucedía en Perú.

El gobierno ha reabierto una investigación acerca del programa de control de natalidad mediante la esterilización. Esto es un punto positivo para quienes sienten que sus derechos a ser padres están siendo violados.

Una mujer, llamada Paccohuanca, no olvida las palabras dichas por una enfermera cuando ella no estuvo de acuerdo en aceptar lo que para muchos es una solución a la pobreza de este país: «Como yo ya tenía cuatro hijos, me dijeron que no podía tener más. Pero yo no quise y les dije que no quería ser esterilizada«. Después de varias semanas de evitarlos tuvo que volver a enfrentarse a las enfermeras: «Estuve escapándome, pero me alcanzaron con la ambulancia y a la fuerza me subieron«.

La llevaron a una clínica y la hicieron entrar en una sala: «Me hicieron quitar toda la ropa. Tenía miedo y nervios. Me puse a llorar«. Un relato realmente estremecedor con un final totalmente imaginable.

Mediante una comisión parlamentaria que se estableció en el año 2002 se esterilizaron a 346.219 mujeres y 24.435 hombres durante los últimos 7 años. Este plan intentó bajar la natalidad de este país y así tener menos bocas para alimentar, y así poder sacar a las familias de la pobreza.

Para la señora Paccohuanca sus derechos fueron violados. Este es uno de los miles casos que fueron denunciados por quienes fueron obligadas a someterse a operaciones y que no pudieron negarse.

«Algunas de las mujeres fueron esterilizadas voluntariamente» se anuncia desde el gobierno «Pero siempre dicen que fueron engañadas. Algunas son quechuas y ni saben hablar castellano, son analfabetas«. «No les dijeron, o no sabían, cómo era la operación en realidad. A veces se les dijo que ‘si van a tener hartos (muchos) hijos van a pagar’«.

«Hubo una política de desprecio hacia las personas más pobres, y no se puede hablar de negligencia médica«.

En estos casos creo que sería necesario crear políticas de educación sexual y planes que les permitan a las familias salir de la pobreza pero no a través de estos métodos. Considero que así se está condenando a las personas, de una manera implícita, a que siempre van a ser pobres, en vez de educarlos por si el día de mañana su situación es mejor y ahí si pueden tener más hijos.

Vía | BBC
Foto | FLickr – Benitoo