Un perro… una gran responsabilidad

Un perro… una gran responsabilidad

Escrito por: Leticia   @leticiadelpino    31 agosto 2009     2 minutos

En casi ninguna familia, al llegar a los tres años, faltará la frase: ¡quiero un perro! A esta edad los niños comienzan a tomar contacto con las mascotas de amigos o familiares y ven a los animales jugar alegremente en el jardín. Pero ellos aun no tienen la capacidad de entender que detrás de esa linda bola de pelos existe una enorme responsabilidad, tener una mascota en casa es mucho más que jugar un rato al día con él.

Si bien es cierto que un niño puede encargarse de ayudarnos con el animal de acompañarlo en su paseo o de ponerle la comida cuando nosotros lo indiquemos, la verdadera responsabilidad la tendremos nosotros. Por tal motivo, es necesario, como padres, que pensemos bien si realmente la familia quiere una mascota y si estamos dispuestos a asumir todo lo que ello acarrea (incluido el gasto o la limitación para viajar). Jamás se debe comprar un animal sólo por darle un gusto a un chico.

Que tengamos una mascota tiene miles de ventajas, pero también miles de desventajas. Al convivir con un animal nuestro pequeño se familiariza con las funciones naturales de los seres vivos, se hacen más responsables y tienen un fiel amigo de juegos. Sin embargo, un animal es fuente de olores, y además es normal que nos estropee el mobiliario de casa.

Es cierto, tendremos su compañía y amistad pero también una carga a la hora de salir de viaje. Pros y contras pueden ponerse en una balanza y cada una de las familias deberá tomar la decisión que considere más adecuada.

En el caso de los más chiquitos para irlos educando en el respeto a los animales y sus cuidados es buena idea empezar por una mascota pequeña y que requiera poco mantenimiento. Se trata deque los pequeños vayan comprendiendo que tener in animal supone una serie de rutinas inexcusables y deque poco a poco, en función de su edad, se vayan implicando en ellas.

Aspectos buenos
El perro es el animal más sociable, pero el gato exige menos dedicación (no necesita pasear y es más independiente). Los pájaros son alegres y requieren cuidados mínimos y los conejos son de fácil manejo y se adaptan a pequeños espacios. Los hámsteres tampoco necesitan mucho espacio. Los peces son vistosos, coloridos y silenciosos.

Aspectos negativos
Los perros requieren mucha atención y varios paseos al día, y los gatos aceptan mal los viajes y los cambios. Los pájaros son ruidosos y ensucian de cáscaras los alrededores de su jaula. Los conejos pueden ser sucios y roen los muebles de madera.

Fuente | Ser Padres Hoy


un comentario

  1. Tener un perro conlleva una gran responsabilidad, no es un juguete para nuestros hijos, por eso hay que educarlos desde pequeños.