Neonatología: Introducción a la ciencia

Neonatología: Introducción a la ciencia

Escrito por: Sergio López    22 mayo 2012     2 minutos

Aprendamos un poco más de la ciencia que trata a los bebés.

Hemos oído, en algún momento, la palabra neo natos, o escuchado algo sobre la planta de neonatología. Pero, ¿sabemos con exactitud de lo que nos están hablando? Vamos a aprender un poco más de esta rama de la medicina.

Siendo una rama de la pediatría que se encarga de los recién nacidos, estén sanos o no, la palabra en si tiene procedencia latina, en la que «nato» significa «nacer» y «logo» se relaciona con el estudio o la investigación. «El estudio del recién nacido» es la frase que resume perfectamente esta ciencia.

El primero en dar pasos a este respecto fue el médico francés Pierre Budin, en 1892, escribiendo un libro sobre los problemas de los lactantes prematuros y la distinción entre lactantes pequeños y grandes durante la gestación.

A comienzos del siglo XX, fueron el norteamericano Julios Hess y el alemán Albrecht Peiper los que se volcaron más en los estudios de los cuidados y la neurofisiología de los bebés prematuros. A lo largo de este siglo, han sido muchas las contribuciones al respecto, aportando datos sobre la adaptación del recién nacido fuera del útero, la cirugía intrauterina, los progresos en la nutrición y alimentación de los neo natos o las medidas higiénicas a tomar dentro del departamento de enfermería.

Destacar aún más los avances en la atención intensiva en los neo natos y las mejoras en la vigilancia de los problemas respiratorios. Desde 1887, diferentes tipos de ventiladores de asistencia, dieron lugar, a finales del siglo XX, al primer ventilador neonatal con presión positiva («Baby bird»). Contribuciones posteriores aumentaron el conocimiento sobre la fisiología en la respiración de los neo natos y, como consecuencia de ello, una gran mejora en la respiración asistida mecánica de los mismos.

Espero que haya resultado interesante. Nunca está de más conocer algo sobre lo relacionado con nuestro bebé, aunque pensemos que no nos concierne. Que eso son cosas de la ciencia y de los médicos. Siempre es bueno estar intelectualmente preparado. Nunca se sabe.

Vía | aibarra.org
Foto | sxc-pepoitana