Distintos tipos de madres en la consulta del pediatra

Distintos tipos de madres en la consulta del pediatra

Escrito por: Sacra    11 julio 2009     2 minutos

Amalia Arce es una pediatra y mamá que, además, escribe en su blog personal algunas de sus experiencias y conocimientos acerca de mundo de los bebés. A mí me ha resultado especialmente interesante y divertido esta clasificación que hace de los diferentes tipos de madres que pueden aparecer en su consulta. ¿Te atreves a buscarte cuál puede ser el tuyo?

  • Mamá pulpo o mamá lapa: el hijo es una prolongación de sí misma, todo el día pegado a ella. Si lo deja en la camilla, ella sigue junto a él para que el pequeño le rodee el cuello con toda la fuerza del mundo.
  • Mamá ‘esto no va conmigo‘: es lo contrario de la mamá pulpo. No toca a su hijo, no está cerca para ayudarle a pasar alguna prueba y sólo se limita a sentarse en una silla y esperar que se termine pronto.
  • Mamá marquesa: espera a que sean otros (abuela, enfermera, canguro…) los que desnuden al niño y lo tumben en la camilla.
  • Mamá de telenovela: se sienta en la consulta y, con mucha calma y todo lujo de detalles, te cuenta la historia entera de su hijo desde el primer segundo en el que nació.
  • Mamá pidona: nada más entrar ya te pide el justificante para entregar en el trabajo, luego, ya que está allí y ha traído al niño mayor, te pide que le mires un grano, para rematar con la solicitud de todo tipo de recetas.
  • Mamá ‘lista de la compra’: nada más entrar en la consulta ya te ha dejado sobre la mesa una lista con la temperatura corporal del niño durante las 24 horas anteriores. Además la cantidad y horas en las que le ha dado el antitérmico y las posibles causas después de una larga búsqueda en ‘Google’.
  • Mamá ‘angustias’: cualquier enfermedad o trastorno en sus hijos la vive con autentica desesperanza. Aunque, en la mayoría de los casos, suele ser algo agresiva antes de acabar desmoronándose ante su mala suerte en la crianza.
  • Mamá supermamá: es aquella que presente siempre un aspecto impecable, subida a unos tacones de vértigo, sin una arruga en su impoluto vestido blanco, bien maquillada y sonriente mientras empuja un carrito y lleva de la mano a otro bebé que apenas anda.
  • Mamá ‘friendly’: está tan acostumbrada a acudir a urgencias que ya te trata como si fueras de la familia, al fin y al cabo se supone que ya te ha contado toda su vida. Lo peor es que tú no terminas de ubicarla entre las caras de las 1000 mamás con las que trataste el mes pasado.

Vía | Diario de una mamá pediatra