Bolitas de gel, amenaza para los peques en Estados Unidos

Que los niños quieren experimentar con todo lo que les rodea en su entorno es algo normal, además de óptimo para que vayan reconociendo todo aquello de lo que se compone su nuevo mundo. Pero hay que tener cuidado con algunos objetos.

Se ha dado un caso en Texas, Estados Unidos, en el que una niña se había tragado una bolita de gelatina que le había obstruido los intestinos. La particularidad de este pequeño objeto es que, al contacto con el agua, aumenta de tamaño hasta alcanzar incluso el mismo de una pelota de tenis.

Los bebés tienen la manía de llevarse todo a la boca, fundamentalmente por ese afán de conocer y experimentar que poseen. Sin embargo, hay que tener mucho cuidado con este tipo de objetos. No hay más que ver el caso de esta pequeña de 8 meses que se tragó esta bolita que, por suerte, fue extirpada quirúrgicamente por los médicos, después de comprobar que la bola, al aumentar de tamaño, que el intestino delgado del bebé estaba distendida y que su abdomen crecía con el paso de las horas.

La niña está sana y salva pero los médicos advierten que se debe estar muy atento con estas bolas de gelatina, ya que no sólo pueden suponer una perforación del intestino de un bebé, sino que puede llegar a producirles la muerte si no es atajado a tiempo para su extirpación.

No es el primer caso que, al parecer, se conoce al respecto. Y no sólo con humanos. Según informes, se han encontrado pájaros muertos después de comer un producto similar que se utiliza en labores de jardinería.

Aunque el producto, según sus fabricantes, está indicado para mayores de 3 años, se debe vigilar por parte de los padres si está cerca de un recién nacido. Sólo se convierte en un objeto de riesgo para los más pequeños si se encuentra cerca de ellos, por lo que se debe evitar a toda costa que se produzca esta situación.

Vía | terra.es
Foto | panoramadiario.com

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