Anomalía congénita: Labio leporino

Anomalía congénita: Labio leporino

Escrito por: Belén    4 julio 2009     2 minutos

El labio leporino o hendido, es una deformación que ocurre porque el labio no se desarrolla completamente en el periodo fetal. Es una malformación relativamente frecuente que afecta más a los niños que a las niñas en una relación de 7 a 3. Puede aparecer a uno de los lados o en ambos, aunque predomina el labio hendido lateral izquierdo. Puede variar desde un leve corte en el labio hasta una gran abertura del labio hasta la nariz.

Las causas por las que un bebé no termina de desarrollar sus labios no se conocen totalmente. Se sabe que la genética y los factores ambientales afectan a las probabilidades de que ocurra. Si uno de los padres nació con labio leporino sus hijos tienen bastantes posibilidades de heredar la malformación. Si es el caso, existe la posibilidad de comentarlo con un especialista en genética.

Aunque lo normal es que el bebé con labio leporino pueda succionar, necesitará más tiempo y paciencia para mamar. Con cariño y técnica se consigue una lactancia materna satisfactoria casi siempre. Tanto el médico como el resto del personal sanitario pueden ayudar a la madre en esta tarea e indicarle otros métodos si no consigue amamantar al bebé.

Para los padres es una situación complicada, es normal sentir preocupación y tristeza. No debemos olvidar que el labio leporino no indica necesariamente que el bebé tenga ningún otro tipo de malformación o carencia. Se puede corregir con cirugía desde el primer día de vida, aunque lo habitual es que no se practique hasta que se confirma que el niño está cogiendo peso normalmente y su estado general es óptimo, especialmente su recuento sanguíneo.

Sin embargo no hay prisa, si el bebé crece con normalidad, se puede retrasar la operación hasta los 3 meses o más adelante porque no hay ningún beneficio en adelantarla.

Vía | SECPRE